Humala, sin credenciales democráticas

Por: Gery Vereau*
Mañana domingo los peruanos saldremos a votar en Nueva York y Nueva Jersey, para Presidente del Perú y parlamentarios, y espero que al final de la jornada no nos quedemos con el sabor agridulce de la decepción.

Sobre todo después de que el candidato Ollanta Humala (UPP) ha resucitado el anacronismo del veto militar, al decir que si Lourdes Flores (UN)) gana las elecciones presidenciales los militares darán un golpe de estado, imitando lo que se dijo en los años 30 contra Haya de la Torre (Apra) a quien, en su Plan de Gobierno 2006-2010, llamado el Plan de la Gran Transformación (frase sacada de las canteras del Apra), lo cita con nombre propio para justificar algunas de sus propuestas elaboradas entre gallos y medianoche.

Viniendo esto de un candidato que corre favorito, aunque pienso es poco probable que reúna los votos necesarios para ganar en segunda vuelta, suena imprudente e irresponsable para un país cuya población ha sufrido dictaduras militares a lo largo de la historia (su admirado general Juán Velasco Alvarado recibió una deuda externa de $6,000 millones, son cifras aproximadas, que convirtió en $14,000 millones) que han llevado, en buena parte, al país al despeñadero y a muchos de nosotros a emigrar.

Es posible que su gran cercanía ideológica y política al presidente Hugo Chávez lo empuje a repetir el ejemplo venezolano de partido único, persecución a la prensa y organización de milicias barriales como las de Cuba, en el Perú. Su plan de gobierno, hecho sobre la marcha y presentado el 22 de febrero de este año, contempla, como Chávez, la convocatoria a una Asamblea Constituyente cuya función será mandar a paseo a los parlamentarios que elijamos mañana para colocar en su lugar a personajes adictos a su filiación y claro está sin oposición, como Chávez, o con una oposición de opereta, para gobernar a su antojo seguramente amparado en el poder militar.

Es posible también que los peruanos del exterior, ya que el voto exterior es “incontrolable”, pasemos por algo similar a lo que le hizo el presidente Chávez a los residentes venezolanos en el exterior: sólo tienen derecho a voto exterior aquel que tenga residencia, norteamericana en el caso de los que viven en Estados Unidos. Lo peor del caso es que el candidato Ollanta Humala carece de credenciales democráticas como para no pensar en ello.
*periodista peruano residente en Nueva York