Por: Gery Vereau
El tema comienza a acaparar titulares como éste del diario Wall Street Journal que alguien dejó abandonado en el asiento del tren E, que viene del Bajo Manhattan. Palabras más, palabras menos, dice que los afroamericanos se quejan de discriminación laboral en favor de Hispanos. Y por ello muchos empleadores sufren demandas.
No tiene nada de raro. En Nueva Orleans se pensó los mismo, que los hispanos desplazamos a los afroamericanos. Luego de que el huracán Katrina azotara la ciudad el alcalde afroamericano, Ray Nagin, preocupado por la gran afluencia de trabajadores hispanos, que llegaron a trabajar más horas por menores sueldos y ningún afán de protesta por las condiciones laborales, que podían tomar los trabajos de los obreros afroamericanos dijo "¿Cómo puedo garantizar que Nueva Orleáns no será invadida por trabajadores mexicanos?".
Y hace poco en El Barrio, en el Alto Manhattan un grupo de pandilleros afroamericanos acabaron con la vida de un mexicano, hecho en el que algunos lideres comunitarios quieren ver un enfrentamiento entre estas dos comunidades.
No veo razón para que estos casos lleven a rencillas entre ambas comunidades. Somos distintos. En principio porque los afroamericanos no tienen los problemas migratorios que tienen los miles de latinos que trabajan de manera indocumentada y sin ningún beneficio.
Los niveles de escolaridad y de graduados en las universidades son mayores entre los afroamericanos que entre los latinos. Mayores puestos profesionales están ocupados por ellos y son más en muchos de los puestos de trabajos especializados en las categorías de carpintería, plomería, refrigeración, etc,. Además la representación política afroamericana es mayor en muchos niveles.
Nada de esto, por supuesto, quiere decir que se mantendrá estático. La comunidad latina ha crecido en número y crece en influencia. Más latinos y latinas van a las universidades, la representación política crece en todos los niveles de gobierno y en los campos de la ciencia y los negocios cada vez somos más.
Sólo esperamos que cuando lleguemos a donde ahora está la gran comunidad afroamericana ellos hayan subido otro escalón. De cualquier forma, si los pasamos, en América hay sitio para todos.
Saturday, January 28, 2006
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